Advertisement
Vienen corriendo
Su madre asintió, diciéndole a su hijita que estaba bien. Con una gran sonrisa en la cara, Ella aceptó la propuesta, y el resto es historia. Ahora Ella viene dos veces al mes a jugar con los leones. Ya no necesita su juguete masticable para presentarse. Cuando Ella llega, los leones vienen corriendo.